​ALBERT BORGUNY I CASTELLÓ

Palma 1707-1770

 

Estudió bellas artes y profesó como fraile lego en el convento de los dominicos de Palma. Además de escritor, era grabador, pintor y escultor barroco.

 

En el campo de la escultura se dedicó, sobre todo, a los retablos, de los cuales el más importante es el del altar mayor de la iglesia de Santa Eulària de Palma. También hizo los retablos de la iglesia parroquial de Santa María del Camí, Santa Eugènia, Binissalem y de la capilla del Rosari de la parroquia de Algaida. Asimismo, se le atribuyen los retablos mayores de la Missió de Palma y de Sant Pere de Sencelles.

 

Reformó la decoración pictórica y escultórica de la capilla del Rosari de Sant Domingo, cosa que le supuso duras críticas de autores como Jovellanos y Josep Maria Quadrado. Igual opinión crítica mereció la armadura que confeccionó para el famoso órgano del mismo convento de Sant Domingo, armado por Jordi Bosch i Bernat, que ahora tenemos en la iglesia parroquial de Santanyí.

 

Una de las pocas pinturas suyas que se conservan es la Coronación de la Virgen, depositada en el Museo de Mallorca.

 

Considerado el mejor grabador mallorquín del s. XVIII, es autor de diversas iconografías como la Inmaculada, la Virgen, Ramon Llull, santos, escudos y monedas.

 

Su obra literaria alterna los temas devotos y los satíricos, y se conserva muy poca, porque, después de su muerte, otro fraile de su convento quemó toda la que le pareció deshonesta.

 

Criticado y alabado a partes iguales, su obra no deja a nadie indiferente. Bernat Vidal i Tomàs, en más de una ocasión, afirmó que la fachada de nuestro órgano era “un pequeño Gaudí del siglo XVIII”.

 

 

 

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